La ilusión se ha mantenido hasta el último momento pero finalmente Pastora Soler no ha podido devolver a España el Festival de Eurovisión. La cantante sevillana ha quedado en décima posición con 97 puntos, cumpliendo así uno de los objetivos que la intérprete de "Quédate conmigo" se marcó desde el primer momento: conseguir terminar en el top ten de la clasificación.

Ha sido imposible arrancarle el triunfo a la que era favorita desde hace meses: Loreen. La cantante sueca de origen bereber ha conseguido la victoria con "Euphoria", un tema compuesto por Thomas G:son (coautor de “Quédate conmigo” junto a Tony Sánchez y Erik Bernholm) que ha defendido con una espectacular puesta en escena en la que se esconde y reaparece entre luces y sombras, moviéndose entre lo humano y lo divino. Y, por supuesto, siempre descalza.

Con el triunfo de Loreen, Eurovisión regresa a Suecia por quinta vez en la historia del Festival, tras los triunfos de Abba (1974),  Herreys (1984), Carola (1991) y Charlotte Nilsson (1999). 

 

Pastora Soler ha aparecido sobre el escenario del Baku Crystal Hall poco antes de la 1:30h (hora local) y, como todo el mundo esperaba, su actuación ha sido magistral e impecable. Gracias a ello ha logrado el mejor puesto para España desde 2004, conseguido por Ramón con la canción "Para llenarme de ti". Además, no sumábamos tantos puntos desde Marcos Llunas en 1997.

Los países que han concedido sus votos a España son:

Desde el inicio de su proyecto eurovisivo, Pastora Soler ha dicho que quedar entre los diez primeros puestos sería un logro y, finalmente, así lo ha conseguido: "Mi propósito era disfrutar el momento y así ha sido. He tenido tiempo de pensar durante mi actuación y de mirar a la grada". Tan especial ha sido ese momento en el que más de cien millones de telespectadores de todo el mundo veían su actuación que Pastora Soler no ha podido evitar llorar de emoción al bajar del escenario.